Desde que PP y PSOE aprobaron en el Parlamento la ley 15/97, con el beneplácito de la mayoría de los grupos de la cámara, se allanó el camino para la privatización de la sanidad pública. Posteriormente, diferentes decretos y normativas, tanto estatales como autonómicas, no han hecho más que facilitar el terreno para el saqueo y la destrucción de lo público. Los sucesivos gobiernos que han dirigido la Comunidad de Madrid no han parado de esquilmar el sistema sanitario, más aún si cabe el actual ejecutivo dirigido por Díaz Ayuso y sustentado en la ultraderecha. Terrenos regalados a constructoras para la edificación de hospitales de gestión privada; ambulatorios y laboratorios entregados a manos del capital; cientos de trabajadoras y trabajadores de la limpieza, cocinas, lavandería, administración, etc. puestos en la calle, a la par que se subcontratan estos servicios. Estos son tan solo algunos ejemplos de lo que viene sucediendo en Madrid desde hace décadas y a lo que, quienes nos gobiernan tanto en la Comunidad como en el Estado, o bien favorecen o bien hacen oídos sordos, tal y como ocurre desde el actual gobierno “progresista” de PSOE-UP.
Excusándose en la emergencia sanitaria provocada por la COVID-19, la Comunidad de Madrid decidió clausurar los 37 centros de urgencias SUAP existentes, cifra claramente insuficiente, pero que mitigaba parte de las necesidades asistenciales y ayudaba a no saturar las urgencias de los hospitales. No satisfechos con ello, pasados más de dos años y tras lanzar varios globos sonda sobre cómo reabrirlos, deciden reanudar el servicio en las más lamentables y precarias condiciones, sin profesionales ni capacidad alguna para atender la mínima demanda. Situación aún más hiriente teniendo en cuenta que, hace apenas unos pocos meses, se prescindieron de 6000 trabajadores y trabajadoras del sector alegando que, siendo más baja la incidencia de la COVID, ya no eran necesarios. Sin embargo, hoy se nos dice que no hay sanitarios en los centros porque no existen profesionales para cubrir los puestos. Ante este escenario dantesco, el pueblo trabajador es quien paga las consecuencias, a la par que los seguros y centros privados amasan fortunas gracias al saqueo de lo público y, en muchas ocasiones, a aprovecharse de una situación que se torna desesperada para personas con necesidades asistenciales.
No vamos a tolerar que esto continúe, exigimos la derogación de la ley 15/97 y la vuelta a lo público de todo lo privatizado. Es hora de que el pueblo trabajador se organice y levante sus puños contra esta barbarie. El domingo 13 de noviembre hay prevista una movilización en Madrid y el PCPE y la JCPE lo valoramos positivamente, lo entendemos como un paso más a dar en la lucha por lo público, si bien denunciamos que los colectivos y organizaciones que mayoritariamente lo convocan no reclaman la derogación de la 15/97 e, incluso, muchos de ellos son del ámbito de los Partidos que hoy gobiernan en España y que muy poco o nada hacen por revertir esta situación. El 13 de noviembre todos y todas a la calle, el 14 y sucesivas fechas a organizarse y participar en la lucha desde las plataformas y organizaciones que sí tenemos un discurso claro y contundente contra la situación que padecemos. Si quieres luchar contra esta situación, organízate y TOMA PARTIDO.
Desde el PCPE y la JCPE venimos denunciando la imparable degradación que la sanidad y del resto de los servicios públicos en Madrid. Sabemos que, más allá de las medidas puntuales y necesarias que reclamamos en estos momentos, ningún avance de fondo cabrá esperar dentro del sistema capitalista, que ninguna formación política del espectro parlamentario actual hará más que gestionar los intereses del capital. Solo la superación del sistema capitalista hacia una sociedad socialista y hacia el comunismo garantizará la dignidad y la emancipación del pueblo trabajador.
SANIDAD PÚBLICA, GRATUITA, DE CALIDAD Y UNIVERSAL
TODO PARA LA CLASE OBRERA
¡TOMA PARTIDO!
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