Uno se enriquece mientras otros no cobran. Miguel Angel Ramirez es uno de esos ejemplos icónicos de cómo el capitalismo enriquece y favorece a los empresarios más miserables y que más agreden las vidas de cientos de familias llevándolas a la ruina a través de trapicheos e impagos salariales a sus trabajadoras y trabajadores.
Más conocido por ser el presidente del club de fútbol Unión Deportivo las Palmas (como tantos otros corruptos protagonistas del capitalismo) esta persona se ha lucrado con cantidades millonarias proporcionando servicios de seguridad fundamentalmente de empresas públicas tales como el Ministerio de defensa, el Metro de Madrid o la Tesorería General de la Seguridad social donde llegó a defraudar sólo hasta el 2015, más de 21 millones de euros registrando salarios como dietas según denunció el Instituto Laboral.
Este amigo del exministro Soria y parcialmente indultado por sus robos millonarios por Mariano Rajoy, parece ser, para la ley española, mucho más respetable que quien roba algo de comida para comer, quien se resiste de la policía cuando le arrancan de su casa o quien escribe un tuit contra un personaje de la dictadura franquista. Tal es así, que esta persona ha seguido dirigiendo su empresa vigilancia y seguridad sin dejar de explotar, abusar y robar, salarios y derechos a sus trabajadoras y trabajadores.
Tras llevar dos meses sin pagar a nadie de su plantilla, las trabajadoras y trabajadores se han puesto en lucha para decir ya basta y exigir lo que les están quitando.
Llevan días concentrados en las instalaciones del metro de Sol de difundiendo su lucha y su lamentable situación sin que nadie, ni siquiera instituciones públicas, tomen con dureza medidas ejemplares contra el empresario.
El PCPE va a apoyar esta lucha con las trabajadoras y trabajadores victimas este corrupto “clásico”, habitual y protegido de este sistema, más preocupado de castigar al explotado que castigar al explotador.
El PCPE quiere condenar una vez más este tipo de lamentables agresiones a la clase trabajadora, porque consideramos que esto es la verdadera violencia, la violencia de un sistema capitalista agresivo, injusto, discriminatorio y miserable.
La clase trabajadora, tiene que comenzar a tomar conciencia, a dejar de tener miedo, a levantarse y luchar porque estas acciones son cada vez más numerosas y graves y solo se detendrán frente a una clase obrera, organizada, luchadora y convencida de la necesidad coherente de lucha y para ello, el PCPE estará presente de forma activa en todos estos conflictos, y mostraremos nuestra más enérgica repulsa ante quienes tratan como esclavos a quienes todo lo producimos y desarrollamos.
¡Que viva la lucha de la clase obrera!, Señor Ramirez, ¡paga! Que detrás de tus trabajadores/as estará toda la clase obrera.
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