Elecciones 2023: Declaración conjunta del encuentro internacionalista

Jun 8, 2023 | Actualidad

Baile de sillas en el Titanic

Se pueden hacer muchos análisis de las elecciones municipales y autonómicas del pasado 28 de mayo, y de las generales del 23 de julio próximo en el estado español. Como comunistas revolucionarios, nuestro deber es decir la verdad al proletariado y a todo el pueblo trabajador, y hacer una lectura de clase de lo que sucede en las diferentes naciones (formaciones sociales) oprimidas por el reino de España. Hablamos desde la independencia de clase, y desde la teoría revolucionaria comunista científica.

En la madrugada del 15 de abril de 1912, la orquesta del Titanic, el barco que era el símbolo insumergible del capitalismo, seguía tocando en el salón de baile de primera clase, ajena a la realidad: el buque insignia de la modernidad occidental, metáfora arrogante del imperialismo, se estaba irremediable e inexorablemente hundiendo en el mar.

La aristocracia y la burguesía seguían bailando en medio del lujo, la frivolidad y el hedonismo, indiferentes, como siempre, a lo que estaba sucediendo en las salas de máquinas y calderas del barco, a las tragedias y miserias que estaban ocurriendo en los camarotes de tercera clase, infectados de ratas que ya estaban huyendo de las aguas del Atlántico norte. Ese océano al que, más tarde, haría referencia la organización terrorista del mismo nombre. Dos años después, toda Europa se hundiría en un mar de sangre, barro, horror y masacres. Cinco años después, la aurora roja de la revolución socialista amanecía en el imperio ruso… 1917.

El capitalismo agónico ha entrado en su fase terminal, pero la orquesta del Titanic institucional capitalista sigue organizando bailes de sillas para decidir cómo se van a distribuir las diferentes cuotas de gestión del poder burgués. Es un espectáculo y un teatrillo que cada vez nos interesa menos a la clase obrera y al resto del pueblo trabajador, porque la profunda crisis del capitalismo ya no deja margen para hacer políticas reformistas y/o más o menos diferentes de lo que marca el talón de hierro de la oligarquía imperialista. La derecha y la supuesta “izquierda” se confunden en una misma gestión de las migajas que la Unión Europea y el Banco Central Europeo, representantes del gran capital imperialista, conceden a sus estados subordinados para que nosotros, nosotras, las masas obreras y populares del centro del sistema no nos sublevemos.

La III Guerra Mundial está surgiendo, chorreando sangre y heces, de las entrañas de la bestia capitalista, el monstruo que no fue derrrotado en 1945 junto con el III REICH. Como la Primera y la Segunda Guerras Mundiales, la Tercera es fruto de las contradicciones insolubles de la acumulación capitalista, y de la baja tendencial de la tasa media de ganancia. El Titanic capitalista se hunde sin remedio, tal y como Karl Marx lo previó científicamente hace más de 150 años. Pero la orquesta sigue tocando, y la industria del entretenimiento sigue alienando a la gente. Todo va bien y tal…

Hablar de quién ha conseguido más puestos y escaños en el último baile de sillas del Titanic, de las alianzas y pactos que van a realizar para gestionar la crisis del capitalismo, de los votos de unos y otros, de gobiernos y ayuntamientos, es irrelevante si nuestro verdadero objetivo es darle la vuelta a la Historia y terminar de una vez por todas con las sociedades basadas en la explotación y las opresiones de todo tipo, si nuestro ideal es la sociedad comunista, la libre y consciente asociación de productoras y productores, nuestra verdadera LIBERTAD.

La crisis del capitalismo impulsa irremediablemente a todo el sistema imperialista hacia formas cada vez más brutales, autoritarias, violentas y genocidas de ejercicio del poder burgués, hacia fascismos de nuevo tipo. Que estos sean un reciclaje del viejo nazismo y franquismo, o surjan de la putrefacción definitiva de la socialdemocracia, es secundario. El caso es que la lucha de clases nos la está ganando la burguesía desde hace décadas, y que es hora de que despertemos y enarbolemos nuevamente la bandera roja con la hoz y el martillo de la revolución socialista.

En nuestro último comunicado, del primero de mayo, lanzamos esta consigna:

TRANSFORMAR LA CRISIS CAPITALISTA Y LA GUERRA IMPERIALISTA EN REVOLUCIÓN SOCIALISTA!!!

Y de eso se trata. En este Titanic, todo va a peor para nosotras y nosotros, la clase obrera y el pueblo trabajador. El paro (más de tres millones de trabajadoras y trabajadores, según datos oficiales). La explotación y la precariedad laboral (la mitad del proletariado: tenemos empleos temporales, a tiempo parcial, trabajamos sin cotización a la Seguridad Social, etc…). Los accidentes de trabajo, la inflación y la carestía de la vida (la mitad de la población no llegamos a fin de mes, un millón cuatrocientas mil personas más que en 2021).

Los contratos basura, las hipotecas y alquileres cada vez más caros, los desahucios constantes. Las leyes de extranjería, los recortes en sanidad, educación y servicios sociales, el deterioro general de nuestra salud física y mental (enfermedades laborales, sobremortalidad, accidentes cardiovasculares, cáncer, suicidios, depresiones, adicciones a las drogas, consumo masivo de ansiolíticos, antidepresivos y sedantes, etc..). Las pensiones de miseria, la jubilación cada vez más tarde, los despidos, los ritmos de producción en las fábricas, nuestras mismas condiciones de trabajo, cada vez más duras, la represión contra los que luchamos, contra quienes protestamos, peleamos y nos organizamos.

La clase obrera debemos ponernos en pie y tomar conciencia de nuestra tarea histórica: debemos destruir de una vez para siempre el capitalismo y la propiedad privada de los medios de producción, e iniciar la transición socialista al modo de producción comunista, donde la riqueza creada colectivamente la distribuyamos de forma igualitaria y fraternal. No hay otra alternativa posible.

La clase obrera debemos tomar el poder, debemos hacer la revolución socialista. Esto no es una mera cuestión teórica y abstracta, alejada de nuestra vida real, es un asunto de vida o muerte, antes de que el imperialismo desencadene una guerra nuclear total, o que nuestras condiciones de vida se degraden hasta lo insoportable: la explotación inmisericorde, la miseria, la enfermedad, la locura, la muerte…

¿Exageramos? En el estado español se suicidan más de 4.000 personas al año. El suicidio es la primera causa de muerte no natural entre los 15 y 49 años. Está en constante aumento, síntoma inequívoco de una profunda anomia social. Los intentos de suicidio entre la juventud trabajadora durante la pandemia se incrementaron en un 250 %.

El estado español es el primer consumidor mundial de productos antidepresivos, ansiolíticos y sedantes. La burguesía y sus cómplices nos están zombificando, están destruyendo la salud física y mental del pueblo trabajador en medio de la pasividad, la desesperanza y la indiferencia…

La clase obrera somos fuertes y poderosos, lo vemos en cada huelga general. ¿Qué pasa en el estado español? ¿No hay mil razones para luchar? Tenemos que romper de una vez por todas la “paz (anti)social” de la burguesía, de los (auto)denominados “agentes sociales” y de este gobierno, el más “progresista” del mundo mundial. Tenemos que organizarnos, formarnos y pelear con independencia de clase, al servicio de nuestros intereses, los intereses del proletariado, no de la burguesía y sus lacayos reformistas y socialdemócratas. Que son legión.

Camarada, busca tu puesto en la lucha, recupera la confianza, la voluntad de luchar y vencer, la esperanza de que otro mundo es posible, fraternal y solidario: el COMUNISMO. Para ello debemos destruir hasta la raíz el estado burgués español y su corrupta y parásita monarquía. Es una cuestión de supervivencia, de futuro compartido, de luchar para vencer de verdad y derrotar al capitalismo, para tomar el poder y construir el socialismo.

Tenemos que organizarnos, formarnos y avanzar en el estudio sistemático del socialismo científico, y pelear día a día en las calles y puestos de trabajo, en todas las trincheras de la lucha obrera y popular. Las puertas de todas las organizaciones del ENCUENTRO INTERNACIONALISTA están abiertas de par en par para que te incorpores al combate.

¡Hay que ir a por todas y con todo!

¡REVOLUCIÓN O EXTINCIÓN!

¡COMUNISMO O CAOS!

AGZ-UP Agora Galiza-Unidade Popular

CNC – Coordinación de Núcleos Comunistas

CC – Crida Comunista

HB – Herritar Batasuna

INDAR kolektibo komunista

PCPE – Partido Comunista de los Pueblos de España

PCPC – Partit Comunista del Poble de Catalunya