Por un 1º de mayo combativo

Abr 27, 2020 | Actualidad

En este 2020 la clase obrera asistimos a un 1º de Mayo en condiciones excepcionales. Desde 1889, por decisión del Congreso Socialista Obrero Internacional, el 1º de Mayo es nuestro día y, en todo el mundo la clase obrera, sale a la calle a luchar, a manifestarnos, a decir alto y claro que somos la clase que pone en marchas los países, su economía y lo hace todo.

 Un día para manifestar la necesaria unidad de clase ante el capital y sus lacayos, y en el que elevamos y confirmamos en la calle nuestra independencia y organización de clase. Sin embargo, este 2020, por razones de sobra conocidas, vamos a tener que celebrar el Día internacional de la Clase Trabajadora en nuestra casa, sin poder salir a la calle.

Pero esta situación de confinamiento, no puede restarle ni un ápice de importancia a nuestro Día. Sus principios y valores son guía inexcusable para prepararnos para lo que está por llegar tras superar la crisis sanitaria.

Estamos asistiendo al comienzo de un nuevo ciclo de la crisis estructural del sistema capitalista. El último, que estalló en 2008, ya sabemos cómo fue gestionado por parte de los gobiernos burgueses antipopulares, dejando millones de parados/as, recortes de nuestros derechos y libertades, así como de nuestros servicios públicos (sanidad, educación, etc). Disparó las cifras de pobreza en nuestra tierra, hubo decenas de miles de suicidios y dejó sin vivienda a cientos de miles de familias. El bloque oligárquico burgués dominante, priorizó el mantenimiento de la tasa de ganancias del gran capital frente a las condiciones de vida del pueblo trabajador y, entre otras muchas decisiones negativas para el pueblo trabajador, realizó un rescate de la banca con el dinero de todos y todas, del que faltan por recuperar más de 62.000 millones de Euros que jamás volverán a las arcas públicas

Hoy, la clase obrera, enfrenta este nuevo ciclo de la crisis con un gobierno de coalición socialdemócrata (PSOE y Unidas Podemos) que, como es habitual históricamente, se coloca junto al capital. La socialdemocracia, nos vendrá con sus recetas y promesas de mejoras puntuales con las que maquillar la verdadera realidad de explotación y marginalidad que padecen millones de personas; volverán a intentar convencernos que creer que aún es posible solucionar y mejorar nuestras vidas dentro de este sistema criminal, el capitalismo. 

En la gestión de la crisis del Coronavirus, el Gobierno y la Patronal coinciden en que, en la práctica, sea la clase obrera quien acabe pagando su crisis; pero no se lo vamos a permitir. Son ya cientos de miles las trabajadoras y los trabajadores que han perdido su empleo, o bien que se han visto inmersos en ERTEs indiscriminados y engañosos, o asumiendo por Decreto permisos de trabajo retribuidos “recuperables”. Todas ellas, en el fondo medidas antiobreras aprobadas por el gobierno y abaladas por las grandes centrales sindicales, CC.OO. y UGT.

Si no lo detenemos, la mujer trabajadora nuevamente será la primera en recibir el impacto de las medidas antiobreras del gobierno socialdemócrata. Sobre sus espaldas caerán los despidos y los recortes en las ayudas a las familias, a la dependencia, en servicios sociales. Los empleos que queden con mayor temporalidad serán para ellas.

Si no nos preparamos, nuestra juventud obrera será la última en emplearse, volverá a verse obligada a emigrar o en el mejor de los casos a malvivir en la temporalidad de contratos basura condenando a toda una generación a tirar por la borda su proyecto de vida, de independizarse, de construir su propio futuro. 

Si no nos organizamos, la patronal del sector turístico y los servicios (auténtico motor económico del estado español), hará recaer su recuperación en las plantillas a través de despidos masivos y mayores niveles de sobreexplotación en el personal que mantenga su puesto de trabajo. También, las promesas de mejoras a las camareras de piso en los convenios quedarán para una mejor ocasión.

Ante esta situación se hace más imprescindible que nunca el recuperar el sindicalismo de clase, una práctica sindical de clase fundamentada en la soberanía de las decisiones tomadas por asambleas de trabajadores y trabajadoras, contraria al pacto social y enfrentada a la burocracia sindical. Un sindicalismo internacionalista, capaz de sentir la solidaridad de clase y oponerla al egoísmo patriotero que nos enfrenta como clase por razón de país de nacimiento. Un sindicalismo comprometido con la Paz que no calla ante la OTAN y sus guerras. 

Por ese sindicalismo, basado en la unidad combativa de la clase obrera y en su alianza con los diversos sectores organizados del Pueblo (mujeres trabajadoras, estudiantes, jubiladas/os…), desde el PCPE llamamos al conjunto de las obreras y obreros a organizarse y movilizarse en cada lugar de trabajo y este 1º de Mayo.

En esa línea, el PCPE plantea a nuestra clase, las siguientes propuestas para iniciar la necesaria contraofensiva unitaria que hay que poner en marcha con urgencia:

  • No a las privatizaciones, reversión de las empresas privatizadas.
  • Sanidad pública universal, de calidad y gratuita. No a los conciertos con la privada
  • Cancelación del gasto militar y destino a gasto social. Retirada del ejército de las calles. Salida de la OTAN
  • Mantenimiento del poder adquisitivo de los salarios, no a los despidos, derogación de las contrarreformas laborales, SMI 1.200 €, pensión mínima 1.080 euros.
  • Contra la corrupción, no a la monarquía, por la república socialista 
  • Cierre de los CIES, regularización de toda la población inmigrante.
  • Plan urgente de emergencia social, con atención a todas las familias que lo necesiten
  • No desahucios, no cortes de suministro, seguro de paro indefinido.

Por el Poder Obrero, por el Socialismo, llamamos a los trabajadores y trabajadoras a organizarse con el Partido Comunista de los Pueblos de España. 

 ¡Por un 1º de Mayo combativo!

¡LA CRISIS DEL SISTEMA QUE LA PAGUEN LOS RICOS Y NO LA CLASE OBRERA!

¡¡Viva la lucha de la clase obrera!!

¡¡Tu lucha decide!!