El pasado día 25 de febrero, un trabajador de 23 años, falleció electrocutado al sufrir una descarga eléctrica mientras se encontraba realizando un trabajo en una fábrica de pinturas de la Roda (Albacete). Y en la mañana del 26 de febrero otro trabajador de 55 años, murió (al parecer de infarto) mientras realizaba tareas forestales en Ayna (Albacete).
Ha estas dos muertes se añade la de un trabajador de 46 años, conductor profesional de una empresa de Almansa (Albacete), fallecido el pasado 14 de enero cuando se disponía a descargar una mercancía en un vertedero próximo a la Central Nuclear de Cofrentes (Valencia). Son ya tres muertes en los dos primeros meses del 2015.
Desde el Partido Comunista de los Pueblos de España y los Colectivos de Jóvenes Comunistas en Albacete queremos trasladar a las familias y compañer@s de los trabajadores fallecidos nuestro más sincero pésame.
La precarización de las condiciones de trabajo, hace que l@s trabajador@s se arriesgan cada día que acuden a sus centros de trabajo carentes de la seguridad necesaria para preservar sus vidas, y a cambio reciben condiciones laborales y salarios de miseria.
El sistema capitalista se mantiene gracias a la explotación de la clase obrera, sacrifica sin dudarlo la vida de cualquier trabajador o trabajadora para mantener o aumentar su tasa de ganancia.
Estos trabajadores muertos, al igual que la mayoría de los “accidentes laborales”, es la más pura expresión de un sistema basado en la propiedad privada de los medios de producción y en la explotación de l@s trabajador@s, por lo tanto la muerte de trabajador@s desarrollando su labor son crímenes contra la clase obrera.
Desde el PCPE y los CJC en Albacete, exigimos que se depuren todas las responsabilidades y que los culpables, para variar, sean juzgados y condenados.
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